La calma de Lin Zhiyi sorprendió a todos.
La persona más marginada de la Familia Gong ya no era tímida ni hablaba con la cabeza agachada.
Simplemente se paró en el escenario, luchando por sí misma.
Su mirada era clara y decidida, recorriendo la expresión indiferente y peligrosa de Gong Chen, sin ningún indicio de retroceder.
Cuando la situación se revirtió, todas las cámaras se dirigieron al Periodista Chen y Song Wanqiu.
El Periodista Chen, sintiéndose incómodo, inconscientemente miró a Song Wanqiu.
Song Wanqiu frunció ligeramente el ceño y le dirigió una mirada.
El Periodista Chen se defendió en voz alta:
—Señorita Lin, ¿no puede difamarnos a la Señorita Song y a mí solo porque le he hecho algunas preguntas, verdad?
Los ojos de Song Wanqiu se enrojecieron mientras decía: