Al ver que la chica tenía a Hu San bajo control, Han Jing y Lan Yu también se apresuraron a acercarse.
Sin embargo, la primera reacción de estos dos no fue correr hacia Hu San, sino hacia el lado de Lu Youming.
Han Jing estaba muy ansioso, corriendo para revisar a Lu Youming de arriba a abajo, bombardeándolo con preguntas:
—¿Estás herido? ¿Tienes algún corte? ¿Hay algún lugar donde estés sangrando?
Esta escena desconcertó a Lu Sheng.
La preocupación del chico pelirrojo parecía excesiva, como si incluso una lesión menor mereciera tal preocupación.
Los ojos del chico de pelo negro tenían un aire frío, y con solo una breve declaración de tranquilidad, fue a atar a Hu San.
El área alrededor de El Profundo estaba llena de gente y bulliciosa, así que Lu Sheng los siguió y todos se subieron directamente al auto de Hu San.