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—Esperen y verán. La grieta espacial se abrirá muy pronto. Todos ustedes morirán. ¡Morirán! ¡Jeje!
Una risa extraña resonó por toda la Secta del Domador de Bestias. Todos los que escucharon la voz sintieron que se les erizaba el cuero cabelludo y sus corazones palpitaban.
Algunos de los discípulos más débiles que escucharon la voz escupieron sangre. Sus rostros estaban pálidos como el papel.
Los discípulos de la secta, que habían estado cultivando, se asustaron por el sonido. Todos miraron en dirección al área prohibida.
El gordito, que estaba comiendo pollo asado en el sillón reclinable, cayó al suelo y miró con temor hacia el área prohibida.
¡Rugido!
Algunas Bestias Demoníacas se pararon frente al gordito y lo protegieron.
Estas Bestias Demoníacas eran el Tigre de Relámpago y el Halcón Relámpago. Eran los subordinados que Li Xuan había acogido. Antes de que Li Xuan se fuera, había ordenado a estas Bestias Demoníacas que protegieran al gordito.