¡Definitivamente No Puede Perder!
Han Jue no conocía la situación en el Palacio Numinosa. Ahora solo tenía un objetivo.
¡Derrotar a Long Shan!
Long Shan era claramente más fuerte que el Dios Marcial Espiritual Gigante, pero Han Jue no sentía ningún peligro.
¡No importaba lo fuerte que fuera, seguía siendo un Gran Inmortal del Cielo de Unidad!
Los dos se acercaron cada vez más, sus auras aumentando en intensidad.
El cielo circundante se distorsionó.
—Por favor, lucha conmigo con la determinación de matar, porque no mostraré piedad —dijo Long Shan mirándolo fríamente.
Han Jue maldijo en silencio.
«Tienes la Corte Celestial detrás de ti y al Emperador Celestial como padre. ¡Por supuesto que no tienes miedo!»
«¿Pero yo?»
Han Jue desarrolló tres estrellas de puntos de odio hacia Long Shan.
¡Casi al mismo tiempo!
Han Jue y Long Shan se precipitaron el uno hacia el otro.
¡Boom
¡Una fuerte luz estalló, iluminando el cielo!
Han Jue rápidamente blandió la Espada del Juicio Primordial y luchó con Long Shan.