Han Jue usó el Token del Dao Celestial para observar la grieta en el cielo.
Desde el punto de vista del Dao Celestial, el mundo era un enorme espacio sellado. Ahora, este espacio sellado había sido desgarrado por una fuerza misteriosa.
Como deidad del mundo mortal, Han Jue instintivamente sintió una sensación de peligro.
¡Ataque enemigo!
Han Jue estaba a punto de actuar cuando vio al Buda de la Túnica Blanca aparecer frente a la grieta.
—¿Eh?
El Buda de la Túnica Blanca estaba sorprendido. Levantó sus manos e intentó usar sus poderes Dhármicos para reparar la grieta en el cielo.
En ese momento, un fuerte viento vino de la grieta, sobresaltando al Buda de la Túnica Blanca quien sacó el Bastón del Buda Tathagata.
Una figura aterradora salió lentamente. Medía mil pies de altura y vestía una túnica negra con nueve dragones impresos en ella. También llevaba una corona de hueso con cuernos y sostenía una siniestra guadaña larga.