Frente a esta mirada misteriosa, Han Jue no pudo evitar sentirse incómodo. Levantó la vista.
La mirada de Han Jue atravesó las capas de nubes caóticas y vio un par de ojos. Estos ojos eran como los ojos de un humano. Eran extremadamente indiferentes como si no tuvieran emociones.
¡Boom!
La conciencia de Han Jue explotó. Inconscientemente, presenció una gran batalla. Innumerables figuras aterradoras se abalanzaron hacia la figura más grande y majestuosa como polillas a una llama.
Esa majestuosa figura se erguía sobre el trono de loto y sostenía un hacha enorme. Una luz deslumbrante brillaba sobre su cabeza, y su poder divino era vasto. Hizo que Han Jue se estremeciera.
¡Qué tipo de espíritu era este!
Era indescriptible.
Han Jue no vio el final de esta batalla. Cuando volvió en sí, todavía estaba en el Vacío Caótico, pero la poderosa figura frente a él ya se había ido.