Joelson ha llegado

Había un dejo de tristeza en el rostro de Dayshannon, lo que hizo que todos los presentes sintieran una punzada de angustia.

¿Quién podría hacer que la Princesa Dayshannon se viera así?

—Entonces dime, ¿quién es él? —Don Quijote frunció el ceño, sus ojos agudos escudriñando la pantalla mágica.

De repente, sus ojos se detuvieron y pronunció un nombre:

—Joelson Edward, cuarto grado, nivel 47.

Cuarto grado, nivel 47.

Este resultado era demasiado llamativo entre los estudiantes de sexto grado. Don Quijote no pudo evitar notarlo.

Cuarto grado, como máximo, tenía la fuerza de un mago de tercer o cuarto grado.

¡¿Un mago de cuarto nivel como máximo, y solo pudo llegar al piso 47?! ¡¿Cómo lo hizo?!

—¡¿Es él?!

Don Quijote señaló el nombre de Joelson y le preguntó a Dayshannon.

Dayshannon no quería causarle problemas a Joelson. Estaba a punto de negarlo, pero no dijo nada.

De repente, una voz clara sonó desde fuera de la multitud.

—¡Así es, soy yo!