Ya fueran las personas del Reino Divino de la Matanza o las personas de la Iglesia de la Luz...
Todos estaban conmocionados por lo que estaban viendo.
Los ojos de Gary estaban muy abiertos y su corazón estaba lleno de asombro. No pudo evitar murmurar para sí mismo: «¿Ni siquiera tienen derecho a atacar?»
En la etapa media del reino de los semidioses, Greer, quien había madurado y dominado un fuego arcano, ¿estaba en un estado tan terrible frente a Joelson?
¡En realidad ni siquiera tenía las cualificaciones para luchar!
¿No estaba solo en el nivel de deidad?
¡Qué aterrador era su talento!
Gary no era el único que pensaba así. Todos estaban en estado de shock.
El más impactado seguía siendo Greer. Solo él mismo sabía cuán tremenda era la presión al enfrentarse a Joelson.
Ya no era capaz de usar ni un solo hilo del significado arcano del fuego. Ni siquiera podía controlar una sola chispa.
—Señor... Señor, todo esto es un malentendido.