—Esto... esto es...
No solo el Emperador de Jade, sino también los demás miraron la pintura y quedaron instantáneamente cautivados. Sus corazones latían con fuerza.
En la pintura, había un océano gigantesco. El océano era tan amplio, estaba muy tranquilo y pacífico. Era claro como un espejo. No había nada más en el océano excepto una figura gigantesca que yacía en medio del océano.
La figura parecía una ballena. Era muy enorme. Su amplia aleta se extendía como dos alas. Aunque solo una pequeña cabeza aparecía del agua, la mitad de su cuerpo ya estaba más allá de la imaginación. Era como si su boca pudiera engullir el mundo entero.
Mu...
Vagamente, un sonido se escuchó en sus oídos.
Un Qi aterrador salió de esa figura junto con la presión del océano. Golpeó a la multitud. Esta sensación era... como si un viento salvaje estuviera soplando y les dificultara respirar.
Esto no era toda la pintura aún. ¡Sobre el mar, había un pájaro gigantesco volando!