—¿Curó todas las plagas? —Lu Yue frunció el ceño. Estaba sorprendido pero mantuvo la calma.
Preguntó:
—¿Quién vino?
El discípulo respondió:
—Además del Inmortal que vino la otra vez, esta vez vino otro Inmortal junto con un Soldado Celestial. También, la Vaca Caballo del Inframundo vino también.
—Parece que después de escapar el otro día, fueron a buscar ayuda! —Lu Yue sonrió fríamente. Continuó preguntando:
— ¿Sabes cómo lo curaron?
—Pusieron un tipo de medicamento en el agua del pozo y se lo dieron a la gente —respondió el discípulo. Agitó su mano y apareció un cuenco con un líquido marrón. Parecía ordinario.
Lu Yue recibió el cuenco y lo miró. Luego lo levantó para olerlo. Su rostro cambió y comenzó a parecer bastante inquieto.
El discípulo estaba curioso.
—Maestro, ¿sabe qué hay en el líquido?
Lu Yue miró a su discípulo fríamente sin inmutarse.
—No puedo decirlo por ahora, pero... lo sabré después de probarlo.