—¡No estoy convencido!
La voz tranquila de Wang Teng se extendió por todo el estadio. Todos los presentes podían oírlo.
En ese momento, ya fueran estudiantes de primer año o estudiantes mayores, o los directores e instructores detrás, todos se sorprendieron.
¡Un estudiante difícil!
Este fue el pensamiento que cruzó por la mente de los instructores. Simultáneamente, una sonrisa misteriosa apareció en el borde de sus labios.
¡Un estudiante difícil era bueno. Un estudiante difícil era interesante!
Les encantaban los estudiantes difíciles.
¡Interesante! Los estudiantes mayores se rieron. Se reían de esta sobreestimación de sí mismo y su ignorancia.
Algunas personas ya entendían lo que había sucedido. El presidente parecía estar elogiando a Wang Teng hace un momento, y tenía grandes esperanzas en él. Sin embargo, cuando lo dijo frente a todos y colocó a Wang Teng en un pedestal, en realidad estaba invitando a más enemigos para él.