—Lin Zhan, eres demasiado tímido. Hay tres caminos frente a nosotros. Si no nos separamos, ¿cuánto tiempo vamos a estar buscando? —se burló Chong Liang del equipo Colmillo de Lobo. No perdía ninguna oportunidad para menospreciar a Lin Zhan.
—Es mejor tardar más tiempo que perder nuestras vidas —respondió Lin Zhan, no estaba convencido.
—Tenemos tiempo limitado. Necesitamos eliminar las apariciones oscuras lo antes posible. Si no fuera así, no te habríamos reclutado —Liu Huaixin miró a Yao Jun discretamente. Ordenó con expresión severa:
— Equipo Guerrero Tigre, vayan a la izquierda. Equipo Colmillo de Lobo, vayan a la derecha. Yo guiaré a mis subordinados por el centro.
Lin Zhan abrió la boca. Suspiró en su interior y al final no dijo nada.
«¡No podía luchar contra las circunstancias!»
«No tenía ningún respaldo para ofender a los militares».