Un Desliz Descuidado, ¿Otro Avance?

Lance fue envuelto por la electricidad. Se desplomó en el suelo y no pudo seguir luchando. Esto puso fin a la pelea, y como era de esperar, ¡Meng Lei ganó!

¡Luego se pavoneó con 50,000 monedas de oro bajo las miradas frustradas de la nobleza de la Gente Dragón!

—Hermano, ¡eres increíble! ¿Puedes decirme exactamente cómo lograste realizar la liberación instantánea de un hechizo de tercer grado? ¿Has alcanzado el nivel del gran Mago de Séptimo Grado?

—¿Me creerías si te lo dijera?

—Eh... parece poco probable, ¿verdad?

—En ese caso, ¿por qué preguntaste?

—¡Está bien! Por cierto, hermano, acabas de ganar 50,000 monedas de oro. ¿Vamos a celebrar con una buena comida?

—¡Me temo que no!

—¿Por qué?

—Porque voy a ver al Jefe de Departamento Dirk ahora, ¿quieres venir?

—¿Buscarlo? ¡No, gracias!

Tan pronto como Meng Lei mencionó al profesor jefe, la cara de Hart el Gordo cambió instantáneamente. ¡Sacudió la cabeza vigorosamente y salió corriendo como si estuviera huyendo de algo!