¿He Golpeado al Príncipe Heredero? El Señor de los Cielos

¡Cuernos de dragón afilados y salvajes!

¡Escamas de dragón que brillaban como el oro!

¡Imponentes y afiladas garras de dragón!

¡Poder de dragón surgiendo y agitándose!

¡Rugidos de dragón fuertes, claros y sonoros!

¡Cada uno de ellos era indicativo de la verdadera identidad de esa enorme criatura!

¡Sí, así es!

¡La aterradora criatura actualmente suspendida en lo alto del cielo y liberando poder de dragón a voluntad no era otra que la existencia que se encontraba en la cima de la pirámide de formas de vida del continente y conocida como el Señor de los Cielos—el rey de todos los dragones, el Dragón Colosal Dorado!

¡Rugido!

El Dragón Colosal Dorado rugió hacia el cielo. Su cuerpo de 100 metros de largo era increíblemente masivo. Sus músculos eran poderosos y rebosaban de gran fuerza, mientras que sus garras eran incomparablemente afiladas...

¡Era poderoso, hermoso, una combinación de dominio y belleza, y una coexistencia de poder y estética!