LUNA – Capítulo 5: El Puente de las Marionetas Rotas (Inspirado en el Capítulo 5 de "Gypsy")
El cuchillo que Clara sostenía brilló bajo la luz del apartamento como un diente de plata. Nathaly contuvo el aliento—no por miedo, sino por la extraña certeza de que había visto ese mismo gesto en otra parte. En los dibujos de Emma.
—¿Lillian?— preguntó Nathaly, retrocediendo hacia la mesa de centro. Sus dedos buscaron a tientas el pisapapeles de cristal que Emma había traído de Venecia. Otra mentira. Emma nunca había estado en Italia.
Clara rió, pero era un sonido quebrado, como el crujir de hielo bajo el peso de algo demasiado grande.
—Lillian era mi hermana— dijo, avanzando. —Emma la conoció en Cambridge. Le prometió amor, pero solo quería un final bonito para su colección.
El aire olía a tormenta y a perfume barato—el mismo que Nathaly había olido en el bar El Espejo semanas atrás. ¿Había estado Clara siguiéndola desde entonces?
Jaque Mate (Flashback dentro del Flashback)
Cambridge, 2013. Emma, con el pelo teñido de rubio platino, observa a Lillian subir al puente. Pero esta vez, la cámara gira y muestra a Clara, entonces de 16 años, escondida entre los arbustos, grabando todo con una cámara de video.
CLARA (en flashback, murmurando):
"No lo hagas, Lilly... por favor..."
Emma se vuelve hacia la cámara, como si supiera que está ahí, y sonríe.
El Cuaderno Sangrante
Nathaly esquivó el primer golpe de Clara, haciendo que la hoja del cuchillo se clavara en el sofá. En el forcejeo, el cuaderno de Emma cayó al suelo, abriéndose en una página que Nathaly no había visto:
Croquis del puente de Brooklyn, con anotaciones en alemán: "Der Fall wird perfekt sein" (El caso será perfecto).
Una foto de Nathaly durmiendo, con círculos rojos alrededor de su cuello.
Un boleto de avión a Buenos Aires, fechado para mañana.
—¿Por qué?— Nathaly logró zafarse, empujando a Clara contra la pared. —¿Qué ganaba Emma con esto?—
Clara tosió, manchándose la boca de rojo. ¿Pintalabios o sangre?
—No era suficiente matarlas— susurró. —Quería que alguien las encontrara. Alguien como tú.
La Llamada que lo Cambia Todo
El teléfono de Nathaly vibró. Un número desconocido. Al responder, oyó la voz de Diana, entrecortada:
—El Ludlow, ahora. Emma tiene otra—
Un grito. La línea se cortó.
Clara aprovechó la distracción para lanzarse sobre Nathaly, pero esta vez, Nathaly no dudó. El pisapapeles de cristal se estrelló contra la sien de Clara con un sonido hueco.
La joven se desplomó, sus ojos vidriosos fijos en el techo. ¿Muerta? ¿Inconsciente? Nathaly no se quedó a comprobarlo.
Suite 214: El Teatro de las Sombras
El Ludlow estaba silencioso, demasiado silencioso. La puerta de la suite 214 entreabierta.
Dentro, Diana yacía en la cama, vestida con el mismo traje negro de la galería, pero ahora manchado de vino tinto. ¿O era sangre? Sobre su pecho, un sobre blanco.
Nathaly lo abrió con manos temblorosas:
"Querida Nathaly: Si estás leyendo esto, Diana ya no puede lastimarnos. Tampoco Clara. Ahora solo quedas tú. ¿Recuerdas lo que te dije el día que nos conocimos? 'Todos merecemos un final apropiado a nuestra historia'. El taxi llegará a las 3 AM. No te hará preguntas. Con amor, E."
El reloj marcaba las 2:58.
Cliffhanger: Las Tres Estatuas
Afuera, la lluvia empezó a caer. Nathaly miró por la ventana: en la acera de enfrente, Emma estaba de pie bajo un paraguas transparente, observando el hotel. A su lado, dos figuras familiares:
Valeria, con un vestido blanmo empapado.
Daniel, el esposo de Sofía, sosteniendo una maleta.
Los tres levantaron la mirada hacia la ventana de Nathaly, al unísono.
Entonces, el timbre del taxi sonó en la calle.