La primera apuesta que A'Xiu había hecho fue un triunfo. El rostro de A'Xiu se sonrojó por ganar una gran cantidad de dinero. Miró al Hermano Zhang y a Xiao Wang emocionada.
—Hermano Chen, ¿por qué no te diviertes también? —Xiao Wang rodeó con su brazo a Yang Li y le preguntó a Chen Fan con una sonrisa fría.
En el momento en que A'Xiu cayó en la trampa, él ya se había olvidado de Chen Fan. Había invitado a Chen Fan a unirse al grupo solo para atraer a la chica a su trampa.
La emoción estaba escrita en todo el rostro de A'Xiu. Sin embargo, su mente estaba tranquila y clara. Habló en voz baja:
—El Sr. Chen es un hombre poderoso; no apostaría en juegos tan pequeños.
—¿Hombre poderoso? —Xiao Wang hizo un mohín mientras trataba de contener una carcajada—. ¿Te refieres a él?
Chen Fan era tan tacaño que ni siquiera le daría a su novia diez mil yuan para divertirse. ¿Qué tipo de persona poderosa haría eso?