A la tarde siguiente, dentro del Hospital Número Uno del Pueblo de la Ciudad de Lin en la Provincia de Tian Nan.
Fuera de la UCI se encontraban un hombre y una mujer. El hombre vestía de negro y llevaba el pelo suelto sobre los hombros. Tenía un rostro apuesto y un par de ojos que brillaban con llamas de color azur.
El encanto del joven era deslumbrante, haciendo que su apariencia brillara como el sol naciente, captando la atención de los transeúntes. Muchas enfermeras jóvenes fingían tener la necesidad de pasar junto a él varias veces, solo para echar unos cuantos vistazos más a sus hermosos rasgos.
—¡Es tan guapo! ¡Mucho más atractivo que los miembros de las bandas de K-Pop! —dijo una enfermera atractiva mientras miraba fijamente al joven.
—Es verdad. Se ve mucho más guapo que los actores del televisor. Sería increíble si fuera mi novio —otra enfermera de gran pecho casi estaba babeando.