(Narración del Autor)
El vestido en exhibición era cautivador. Fue hecho especialmente para Nora y el esquema de colores era el de la manada Moon Shine, negro y púrpura.
—Eeee, estoy taaaan emocionada de probármelo, espérenme chicos —Nora golpeaba el suelo con el pie de emoción, con las manos en la cara, sintiéndose entusiasmada.
No se quedó con el resto y subió instantáneamente a probarse la impresionante obra de arte creada por Alana.
Alana era la mejor en el negocio. Uno tiene que hacer una cita con un año de anticipación, pero el caso de los Everest era totalmente diferente. Eran la crema y nata incluso entre la gente rica y también benefactores de Alana, así que ella siempre acomodaba sus peticiones incluso cuando tenía la agenda apretada.