—Puh...
El cuerpo de la chica se sacudió hacia adelante y escupió violentamente un bocado de agua del río, finalmente abriendo los ojos.
Al abrir los ojos, lo primero que vio fue a una enfermera, seguido del turbulento río a su lado, algunos médicos con batas blancas y, sí, un tío muy guapo.
Instintivamente miró a la enfermera y preguntó:
—¿Quién... quién eres? Y ¿dónde estoy...?
—Mi nombre es Yuan Keying, soy enfermera en el Segundo Hospital del Pueblo de Jinling.
La enfermera, habiendo recibido entrenamiento profesional, sabía que la chica acababa de despertar y aún no estaba del todo lúcida, así que la ayudó a recordar lentamente:
—Tuviste un accidente de auto antes, el coche se precipitó accidentalmente al Río Huai...
Antes de que pudiera terminar, un anciano calvo corrió hacia ella, abrazándola fuertemente entre sus brazos, con lágrimas cayendo:
—¡Yan'er! ¡Por fin despertaste! ¡¿Sabes lo asustado que tenías a tu abuelo?!
—¿Abuelo?