Justo cuando Han Yu estaba a punto de soltar la daga en su mano, Lin Qingya de alguna manera reunió el coraje. Levantó la cabeza y la golpeó hacia atrás con fuerza, golpeando a Mary con la parte posterior de su cráneo y empujándola con fuerza.
Mary nunca esperó que Lin Qingya la atacara. En un instante, su hueso de la ceja se abrió, sangrando profusamente, y la delicada pistola pequeña también cayó al suelo debido al impacto.
—¡Qué oportunidad!
Los ojos de Han Yu se iluminaron, y giró su muñeca rápidamente. La daga, que estaba a punto de soltar, silbó por el aire y se disparó hacia el cuerpo de Mary con gran velocidad.
—¡Señorita!
Al ver la daga aparecer repentinamente, la expresión de Anna cambió drásticamente. Gritó y corrió frente a Mary, extendiendo sus brazos y usando su cuerpo para bloquear la daga.
En un instante, la daga se hundió en la espalda de Anna.
—Pfft...
Anna escupió un bocado de sangre fresca, y su rostro instantáneamente se tornó pálido como la muerte.