No me va bien con los conflictos.
Bueno, eso no es estrictamente cierto. Estoy bien con los conflictos, pero en general, no lucharé por algo que no era mío. Aguanté los golpes en la casa de Padre sin contraatacar, pero en el momento en que cualquiera de las Manchas de Mierda tocó a Teddy, todo se acabó.
A Shit Stain Number One le tomó dos meses recuperarse del veneno para ratas que puse en su jambalaya.
Cuando Shit Stain Number Two le dio un cuchillazo a Teddy, le tomó aún más tiempo ser encontrado y curado de la fosa con picos que cavé en el patio trasero.
Lo gracioso era que no importaba cuánto me culparan las Manchas de Mierda, Padre no les creía en absoluto. Yo estaba demasiado roto como para poder contraatacar.
Luego procedió a golpearme hasta dejarme inconsciente para probar su punto.
Fue en ese momento que me di cuenta de que si parecías débil y roto por fuera, podías salirte con la tuya incluso con un asesinato.