Capítulo 92: Kaelen – El Precio del Retorno

Salir de la desolación tóxica de los muelles abandonados y volver a sumergirse en las arterias congestionadas del Sector Delta fue como cambiar una pesadilla por otra, solo que esta estaba más poblada. La luz del "día" artificial de Neo-Veridia ahora bañaba los niveles inferiores con su resplandor grisáceo, revelando la mugre y la decadencia con más detalle, pero también haciendo que las sombras fueran menos profundas, ofreciendo menos cobertura natural. Kaelen se movía con una urgencia nacida del agotamiento y la necesidad de llegar a un lugar seguro.

El hedor a alcantarilla que se aferraba a él era un problema. Atraía miradas de disgusto y, peor aún, la atención no deseada de carroñeros o matones que podrían verlo como una presa fácil y debilitada. Intentó mezclarse con la multitud tanto como fue posible, manteniéndose cerca de los vapores de los puestos de comida o de las rejillas de ventilación que expulsaban aire reciclado para disimular su propio olor, pero sabía que era una solución imperfecta.

Tenía 100 créditos en la tarjeta anónima que le había dado Oráculo y 10 PS en su reserva del Sistema. Era la mayor cantidad de recursos que había tenido desde que llegó a Neo-Veridia, pero se sentía extrañamente más vulnerable que nunca. Los créditos lo convertían en un objetivo para los ladrones, y los PS seguían siendo insuficientes para cualquier mejora significativa o para afrontar un combate serio. Su principal activo era ahora la información: las coordenadas del complejo médico en el Sector Épsilon y el conocimiento sobre Kaito y el Proyecto Quimera.

El viaje de regreso a través del Sector Delta fue una repetición tensa de la ida, pero con la fatiga como un lastre adicional. Se mantuvo en las rutas secundarias, usando su Percepción P7/D2 para detectar y evitar patrullas corporativas y grupos de pandilleros. Vio más signos de violencia: manchas de sangre fresca en un callejón, los restos humeantes de un vehículo atacado, un cuerpo cubierto apresuradamente con una lona bajo un puente peatonal. El Sector Delta vivía al borde de la violencia constante.

Su agotamiento lo hacía propenso a errores. En un momento, al cruzar una calle estrecha, calculó mal la velocidad de un motocarro sobrecargado que venía hacia él y tuvo que lanzarse hacia atrás en el último segundo para evitar ser atropellado, golpeándose la espalda contra la pared de un edificio. El conductor le gritó un insulto ininteligible y siguió su camino sin detenerse. Kaelen se levantó, dolorido y maldiciendo en voz baja. Necesitaba descansar pronto, antes de que la fatiga le costara más caro.

Finalmente, después de casi dos horas de viaje estresante, llegó de nuevo a la frontera con el Sector Gamma. El aire se volvió más denso, el ruido más constante, la multitud más espesa. Se sentía marginalmente más seguro aquí, aunque sabía que era una ilusión.

Se dirigió directamente al Laberinto Nocturno y al Templo de Datos Caído. La plaza frente al edificio en ruinas estaba tan sombría y llena de figuras sospechosas como antes. Entró, ignorando las miradas curiosas o evaluadoras de los ocupas y carroñeros, y descendió por la escalera de caracol hacia la guarida de Oráculo.

Llegó a la puerta de acero reforzado. Esta vez, no necesitó usar el intercomunicador. El escáner óptico sobre la puerta brilló con luz roja al detectarlo, y la voz distorsionada resonó de inmediato.

[Voz Distorsionada: El activo de Kratos regresa. Vivo. Contra ciertas probabilidades. La persistencia es... notable. O quizás simplemente eres difícil de matar. La puerta está abierta. Entra.]

La puerta se deslizó hacia un lado. Kaelen entró en la pequeña y abarrotada sala de control, sintiendo una extraña mezcla de alivio y aprensión. La puerta se cerró detrás de él. Las pantallas seguían parpadeando con datos y imágenes de vigilancia. La silla incómoda seguía en el centro. No había señales de Oráculo.

"Te traje los datos", dijo Kaelen, aunque sabía que Oráculo ya lo sabía.

[Voz Distorsionada: Afirmativo. Ya han sido parcialmente analizados. Fragmentarios, como se esperaba, pero contienen nodos logísticos de Cygnus Tech que pueden ser... útiles... para ciertos intereses. Has cumplido.] La gran pantalla oscura frente a él permaneció en negro. [¿Recibiste la recompensa monetaria?]

"Sí. Cien créditos", confirmó Kaelen.

[Voz Distorsionada: Y el fragmento de información sobre la instalación sospechosa en Épsilon. Úsalo con prudencia. O no. Tu supervivencia no es mi principal preocupación, solo la validez de la información que proporcionas o adquieres.]

Había una frialdad calculadora en la voz que helaba la sangre. Oráculo no era un aliado, solo un comerciante de secretos, indiferente al destino de sus peones.

"Necesito más", dijo Kaelen, dando un paso adelante. "La información sobre el Sector Épsilon es un comienzo, pero necesito saber más sobre Kaito, sobre Quimera. Sobre cómo encontrar a la mujer que se llevaron, Lena".

[Voz Distorsionada: Ya hemos discutido las tarifas, viajero. La información adicional requiere compensación adicional. Tienes cien créditos. Mis tarifas por análisis más profundos o información de rastreo activo comienzan en quinientos.]

Quinientos. Era imposible. "No puedo pagar eso", dijo Kaelen con frustración. "¿No hay... nada más? ¿Otro trabajo? Algo".

Hubo un largo silencio. Las pantallas parpadearon. Kaelen sintió de nuevo esa sensación de ser analizado, sopesado.

[Voz Distorsionada: Tu reciente... excursión... a la Zona Roja no pasó completamente desapercibida. Mis sensores detectaron la actividad de un dron explorador desconocido en las inmediaciones del centro de investigación poco después de tu partida. Y mis contactos en las facciones carroñeras del Delta informan de rumores sobre Ghouls encontrados muertos por electrocución cerca de la ruta que probablemente usaste. Has atraído cierta atención.]

Kaelen sintió un escalofrío. Oráculo sabía lo del dron y lo de los Ghouls. Su red de información era realmente extensa.

[Voz Distorsionada: Sin embargo... tu capacidad para sobrevivir a la Zona Roja y recuperar los datos sugiere un potencial por encima de la media. Podría tener... un uso secundario para alguien con tus habilidades y tu aparente... motivación personal.]

"¿Qué uso?", preguntó Kaelen con cautela.

[Voz Distorsionada: Hay otro paquete de datos que me interesa. Más difícil de obtener. Más arriesgado. No en una ruina olvidada, sino dentro de una red corporativa activa. OmniCorp. Su división de investigación biológica en los niveles medios. Se rumorea que han estado... 'colaborando'... con la Subdivisión Siete de Kaito en ciertos proyectos no oficiales. Necesito pruebas. Registros de comunicación, transferencias de muestras, protocolos conjuntos. La infiltración física sería suicida para ti. Pero quizás... una infiltración digital remota.]

"No soy un hacker", dijo Kaelen inmediatamente.

[Voz Distorsionada: No necesitas serlo. Necesitas plantar un dispositivo. Un troyano de acceso remoto que yo proporcionaré. Requiere acceso físico a una terminal de bajo nivel dentro de las instalaciones de OmniCorp Bio-Investigación, o acceso a un punto de conexión de datos externo vulnerable. Es una misión de infiltración y sigilo, no de hacking. Tus habilidades de percepción y resistencia podrían ser útiles. Y te proporcionaría un señuelo digital y cierta... asistencia técnica limitada... para ayudarte a pasar los controles de seguridad básicos.]

Infiltrarse en una instalación activa de OmniCorp en los niveles medios. Sonaba aún más loco que ir a la Zona Roja. Pero Oráculo tenía razón: era una misión de sigilo, no de combate o hacking directo. Y si OmniCorp estaba colaborando con Kaito... podrían tener información sobre Lena allí.

"¿La recompensa?", preguntó Kaelen.

[Voz Distorsionada: Significativamente mayor. Acceso a mi base de datos completa sobre Kaito y el Proyecto Quimera (Nivel Oráculo-Beta). Y 500 créditos. Suficiente para equiparte mejor... o para desaparecer.]

Acceso completo a la base de datos. Era exactamente lo que necesitaba. Y los créditos le darían opciones reales. Pero el riesgo...

Miró sus 10 PS. Miró su equipo básico. Miró la oscuridad más allá de la puerta de Oráculo. No tenía muchas opciones si quería encontrar a Lena. Tenía que seguir jugando el juego peligroso de Oráculo.

"Acepto", dijo Kaelen. "Dame los detalles. Y el dispositivo".

[Voz Distorsionada: Excelente. La eficiencia es... apreciada. Dispositivo troyano 'Serpiente de Datos' y protocolos de infiltración siendo transferidos ahora. Estudia bien los protocolos. El fracaso en esta misión no resultará en irrelevancia... resultará en una disección corporativa muy desagradable. Ahora vete. Prepara tu incursión.]

Una nueva oleada de datos complejos llenó su interfaz neural: esquemas del dispositivo troyano, protocolos de inserción, análisis de seguridad de bajo nivel de OmniCorp Bio-Investigación, rutas de acceso sugeridas. Y un pequeño paquete de datos adicional.

[Sistema: Nuevo Objeto añadido al Inventario: Dispositivo Troyano 'Serpiente de Datos' (Oráculo-Spec - Uso Único).]

[Sistema: Recibido Paquete de Datos: Protocolos de Infiltración OmniCorp (Oráculo-Spec).]

La puerta de acero se abrió de nuevo. Kaelen se levantó, su mente ya procesando la nueva y peligrosa misión. Había salido de un infierno solo para que le ofrecieran un billete a otro. Pero esta vez, la recompensa podría ser la clave para encontrar a Lena. Salió de la guarida de Oráculo, de vuelta a la oscuridad subterránea del Templo de Datos, con una nueva y desalentadora tarea por delante.