—¿Por qué no te vas? ¿Esperas que Manxue te compre la membresía? ¡No te aproveches tanto de ella! —Lou Yuna miró fijamente a Fang Xinxin y le preguntó.
—Manxue, no puedes ser siempre la buena persona, consintiendo a tu hermana todo el tiempo. Terminarás malcriándola. No deberías consentirla así —Weng Jingke se enganchó del brazo de Fang Manxue, aparentando ser íntimas amigas.
—Tercera hermana, como puedes ver, mis dos buenas amigas no me permitirán comprarte la membresía. No hay nada que pueda hacer al respecto —dijo Fang Manxue, obviamente no le compraría la membresía, pero actuó avergonzada.
—La segunda hermana nunca me ha consentido. Además, nunca me ha dado ni un centavo. No finjas ser una persona generosa —los labios de Fang Xinxin se curvaron sarcásticamente.
—Tú... —Weng Jingke se molestó.
—Está bien —Fang Manxue estaba preocupada de que Fang Xinxin revelara su identidad como la verdadera prometida de Bai Qinghao. Detuvo a Weng Jingke antes de que siguiera hablando.