Capítulo 430: La Soledad Suprema

An Hao tuvo un sueño en el que se encontró sentado sobre una silla inmensamente majestuosa, con un Qilin postrado a sus pies y un Dragón Verdadero girando junto a sus manos. Debajo de él se extendía un deslumbrante cielo estrellado, con figuras que emanaban auras poderosas suspendidas debajo de él, como una serie de escalones.

La sensación era increíblemente maravillosa; sentía un control sobre todo y hasta experimentaba una especie de soledad.

Inmerso en esta sensación, perdió la noción del tiempo.

Después de un período desconocido, una brillante luz dorada estalló repentinamente desde las profundidades del universo debajo, atacándolo y convirtiendo a las poderosas figuras a lo largo de su camino en polvo.

La luz dorada brilló sobre el rostro de An Hao, sintiéndose intensamente caliente, incluso abrasadora.

An Hao abrió los ojos abruptamente, jadeando por aire y empapado en sudor, sus pupilas aún temblando.