El campo de batalla rugía mientras Alex y Vorsak continuaban su intenso duelo.
En lo alto, Alphox chocaba con los dos dragones invocados, creando una violenta tormenta de poder y caos.
Alphox rugió, sus alas sombrías extendiéndose mientras desataba [Llamas de las Sombras], fuego oscuro envolviendo a uno de los dragones por completo.
El dragón chilló en agonía, sus escamas doradas derritiéndose bajo el embate de las llamas antinaturales.
El segundo dragón cargó, pero Alphox estaba listo.
Invocó su [Escudo Sombrío], envolviéndose en una barrera de sombras que absorbió el aliento de fuego del dragón.
La energía redirigida golpeó al atacante, enviándolo en espiral hacia el suelo.
Con una poderosa zambullida, Alphox activó [Zambullida Abismal], precipitándose hacia el dragón caído.
El impacto creó una explosión masiva de sombras, aturdiendo a ambos dragones mientras Alphox emergía ileso.