Capítulo 8 – Rescate de un Pícaro
Alyson
Enumera veintisiete nombres en la nota de rescate, murmurándolos con sus edades, algunos incluso menores de veinte años, y casi me duele que me obligue a sentarme aquí y presenciarlo todo. Me siento culpable y no debería—no estoy con los ancianos, pero ellos oficiaron la ceremonia de Ryan y mía y ahora están en el palacio, ayudando a buscarme, y Olivera parece no soportar oír que yo no querría que nadie muriera, ni siquiera un pícaro.
Aún así escribe la carta, exigiendo que la junta pagará por sus acciones en el pasado, y se negará a continuarlas en el futuro, y me hace dar vueltas la cabeza pensar que nada de esto funcionará como él cree. Ryan, o los ancianos, vendrán por mí y lo matarán en el proceso. Odio pensar así, tan negativamente, pero no tengo ningún vínculo con este Alfa o su desorganizada manada.
Solo necesito a mi manada, mi Alfa, y recuperar mi vida.