—¡Este niño llamado Luca definitivamente se convertirá en una seria amenaza en el futuro! —Los ojos de Rudolph eran fríos y calculadores.
Tal fuerza a tan temprana edad.
Apenas podía imaginar qué tipo de logros alcanzaría este joven una vez que madurara.
¡Si este tipo de genio no puede ser utilizado para sus propios fines, entonces debe encontrar una manera de eliminarlo lo antes posible!
—Jaja, ¿viste eso? Este es un estudiante enseñado por mí, Franklin! —Franklin rió con ganas, dando palmadas en el hombro de Bayou. Su expresión presumida hacía parecer como si él hubiera sido quien rompió la Formación de Sellado de Sangre.
Bayou, por una vez, no discutió con Franklin. Su expresión era compleja mientras miraba a Lucia y suspiraba:
— La Presidenta Lucia realmente posee habilidades extraordinarias. ¡Enseñar a tal prodigio, no puedo evitar admirarla desde el fondo de mi corazón!
Después de todos estos años, Bayou era muy consciente de qué tipo de persona era realmente Franklin.