—¿Cómo tiene la familia Mora acceso a nuestras artes secretas reales? —Fratis también reconoció el origen de la formación, su delicado rostro lleno de confusión y sorpresa.
Las artes secretas de alto nivel de la familia real eran estrictamente confidenciales, fuertemente protegidas por contratos y restricciones. Incluso a los miembros de la realeza se les prohibía transmitirlas, haciendo que cualquier tipo de filtración fuera prácticamente imposible.
—Quién sabe cómo las consiguieron —dijo Luca sacudiendo ligeramente la cabeza.
Sin más pistas, había poco que pudiera deducir.
Pero una vez que Fratis informara de esto a Ciudad del Amanecer, seguramente enviarían especialistas para investigar.
Lo que le dejaba menos de qué preocuparse.
Miró hacia el Distrito Exterior. Allí, Bronte flotaba en el aire, empuñando una espada plateada reluciente, su expresión gélida mientras seis alas plateadas de pura energía de espada se desplegaban detrás de él, agitando su capa con el viento.