Después de lo que había sucedido anoche, Juliana quería entender más a fondo la condición de Benson.
Pidió más detalles.
Benson respondió todo lo que ella quería saber, sin reservas.
Cuando Juliana casi había terminado de hacer preguntas, dijo:
—Pídele a Zach que envíe una copia de tus registros médicos y demás cosas a lo largo de los años.
Por ahora, curar a Benson era la principal preocupación de Juliana.
Benson asintió.
—De acuerdo.
Después de hacer las preguntas, los dos se quedaron en silencio nuevamente. Philip se había ido hace tiempo sensatamente.
Juliana giró la cabeza para mirar a Benson, su brazo vendado con gasa blanca, que era muy dura bajo la luz del sol.
Lo llamó con voz profunda:
—Benson.
Benson la miró.
Juliana lo miró a los ojos y cambió sus palabras:
—Billy es mi compañero, no un amante.
Había revisado su cuenta y confirmado que Billy le daba $100,000 al mes.
Benson asintió:
—Lo dijiste esta mañana, y te creo.
Juliana dijo: