—No pongas toda la basura en el futuro. Bárrela —dijo Juliana mirando a Minna.
—Hermana, te daré media hora para pensarlo —dijo Selene pacientemente, aunque estaba furiosa.
Si no fuera por el deseo particular de Wendy por el estilista aquí, dejar que ella encontrara una manera de atraer al estilista, no querría sufrir humillaciones aquí.
Minna se dio la vuelta y fue al cuarto de servicio. Cuando regresó, tomó una escoba en su mano y fue directamente hacia Selene.
—No puedo barrer esta basura. ¿Cómo puedo clasificar esta basura por un momento? —dijo mientras barría.
Selene se hizo a un lado, y Minna barría hacia donde ella iba. Todavía esperaba la respuesta de Juliana.
—¿De dónde sacaste esta escoba? —le preguntó Juliana a Minna.
—Del baño —respondió Minna.
—Esta basura grande tiene que ser barrida con fuerza —dijo Minna después de tomar la escoba y barrer con fuerza hacia Selene.
Farfullando.
Minna no tenía que barrer pero tomó la escoba y golpeó a Selene en la pantorrilla.