Expulsados.

En los días que siguieron, los Verdemonts dominaron las noticias, con el escándalo y el asesinato apareciendo en la primera plana de todos los periódicos.

Era la noticia principal en redes sociales, televisión y radio, exprimida a fondo por fiscales, policía y políticos que buscaban hacer una declaración. Incluso llegó a ser noticia internacional, tal como había sucedido con el caso del cuco.

Los Verdemonts se enfrentaron a acusaciones infundadas de encubrir a Brandon y participar en su asesinato. El escándalo alcanzó su punto máximo e incluso la luz de la fe se distanció de ellos.

El Ministro de la fe y el líder de la iglesia convocaron personalmente una conferencia de prensa y negaron tener conocimiento sobre algunas de las actividades extracurriculares de los miembros de su familia. Para demostrarlo, Emilia fue relevada de todas sus funciones en la iglesia y se suspendió la asistencia de los Verdemont a misa. El ministro también negó tener conexiones personales con la familia.