Pluma de Fuego Celestial

La subasta continuó, con algunos artículos más pequeños que iban y venían, ninguno captando la atención de Feng Yun.

Todos eran artículos difíciles de obtener para personas normales, pero no tan difíciles para alguien de su estatura.

—Estimados invitados, el siguiente artículo es una verdadera rareza y una de nuestras posesiones más preciadas de la noche.

El subastador hizo una pausa, dejando que la tensión aumentara.

Con un gesto dramático, un asistente trajo una pequeña caja cuidadosamente sellada. Cuando se abrió, la multitud jadeó.

Dentro, descansando sobre un lecho de seda negra, había una pluma radiante. Sus tonos rojos y dorados ardientes brillaban bajo la luz, emitiendo un calor tenue pero palpable que parecía pulsar con vida propia.

—¡Una Pluma de Fuego Celestial!

La multitud estalló en murmullos y jadeos de asombro.