Antes de que el guardaespaldas regresara, Kamron saltó del asiento trasero al del conductor, pisó el acelerador y siguió al auto detrás del de Eliot.
Cuando el guardaespaldas que estaba orinando escuchó el sonido, se dio la vuelta y dejó de orinar. Temblando, corrió tras Kamron.
—¡Sr. Kamron...!
Una anciana pasaba por allí casualmente. Cuando vio esta escena, lo miró con desdén.
—¡Bastardo!
El guardaespaldas dijo:
...
Eliot recibió un gran pedido de la familia Scavo ayer y convocó una reunión de departamentos. En menos de medio día, elaboraron un plan. Hoy, llegó a la Corporación Scavo pero descubrió que Vicente no había ido a la empresa en dos días. Dio una vuelta en su camino de regreso a su empresa y fue a la casa de los Scavo.
Justo cuando se bajó del auto, recibió una llamada telefónica de su asistente. Vicente había llegado a la empresa.
Eliot no tuvo más remedio que volver conduciendo.