El ruido de clic era el sonido de la puerta abriéndose.
—Tengo una pregunta para ti —dijo Nanzhi mientras controlaba las armas a distancia.
No estaba segura de qué tipo de cartas de triunfo tenía esta persona o si había trampas aquí.
Es mejor ser precavida.
La sangre de Chu Muwen se heló y gotas de sudor rodaron desde su cuero cabelludo. Podía sentir una particular intención asesina emanando desde detrás de él.
Su agarre en el rifle de francotirador tembló y sus ojos brillaron con un destello rojo. Rápidamente se dio la vuelta y apuntó el rifle hacia la dirección de Nanzhi.
Pero se quedó atónito al ver las armas flotantes por un momento suspendidas frente a su cara.
¡Dang!
¡Un Despertador basado en metal!
Nanzhi no se quedó quieta y apretó todos los gatillos antes de que Chu Muwen pudiera reaccionar, todos apuntando a incapacitarlo.
Chu Muwen rechinó los dientes y el aire frente a él onduló.
¡No quería usar esto tan pronto pero no había opción!