Mercado de Pescado

Dillon se quedó dentro del apartamento vacío durante mucho tiempo hasta que se calmó. En lugar de sentirse desanimado, el deseo de hacer que Rayne fuera su mujer creció aún más fuerte. Sentía como si estuvieran jugando al gato y al ratón, uno persiguiendo mientras el otro huía.

Cuando Dillon finalmente salió del apartamento, notó a una señora mayor sentada en el banco junto a la entrada.

—Buenas tardes, señora. Estoy buscando a una vieja amiga mía. Escuché que vivía aquí, pero nadie responde. Su nombre es Rayne Weston. ¿Por casualidad la conoce? —preguntó Dillon con su mejor voz de 'buen chico'.

La Vieja Señora Barton miró a Dillon, viendo a un joven apuesto.

—Oh... ¿estás buscando a esa chica maleducada? Sí, se mudó hace unas semanas. No le dijo a nadie, ni recuerdo haber visto camiones de mudanza.

¡Dillon estaba sorprendido! Si Rayne se había mudado hace unas semanas, ¡entonces debió haberse mudado poco después de su primera visita!