Rayne terminó de empacar la caja y se preparó para dirigirse al mercado. —Voy a ir al mercado ahora. Regresaré enseguida.
Mientras caminaba para desbloquear la puerta para salir, notó que la cerradura se sentía un poco apretada. Algo le decía que había algo extraño en ella.
—Oye, Julian, ¿puedes venir aquí y revisar la cerradura de la puerta? Me parece un poco rara —llamó.
Julian se acercó y probó cerrar y abrir la puerta. —Hmm, tienes razón. Se siente diferente a antes —dijo.
Rayne colocó la caja de artículos en el suelo y caminó hacia la tableta que estaba conectada a una pequeña cámara en el exterior. Lentamente comenzó a rebobinar la grabación hasta que vio a sus vecinos demasiado amistosos intentando forzar la cerradura de su puerta anoche.