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Al ver al Anciano Ling, el rostro de Mo Wangchen inmediatamente mostró una mezcla de diversión e impotencia. Juntó sus manos y preguntó:
—Anciano Ling, ¿qué le trae por aquí?
—¡Je je!
El Anciano Ling dio una sonrisa maliciosa y cortésmente condujo a Mo Wangchen a un asiento junto a él. Solo después de un momento habló:
—Las tres píldoras que acabas de refinar, las he evaluado todas. Son indudablemente de tercer grado. Primero, permíteme felicitarte por pasar la evaluación y convertirte oficialmente en un Maestro de Píldoras de tercer grado de la Alianza.
—¡Gracias! —Mo Wangchen sonrió, entendiendo que el cumplido era meramente cortés.
Al ver la expresión medio sonriente de Mo Wangchen, el Anciano Ling se rascó la cabeza incómodamente antes de decir:
—Bueno, como un anciano que es alquimista de sexto grado, he visto bastantes cosas. Pero además de esa Píldora de Transformación Espiritual, no pude identificar los efectos de las otras dos píldoras...