Capítulo 380 Herencia de la Escritura de la Longevidad
¡Boom!
Una explosión atronadora reverberó en el aire mientras una gigantesca estatua humanoide de piedra apareció ante la multitud en un abrir y cerrar de ojos.
Como una montaña, su enorme puño se estrelló con fiereza, como si una montaña se estuviera derrumbando en dirección a la multitud.
—¡Ah!
Los rostros de todos cambiaron drásticamente, y se dispersaron en todas direcciones. Algunos fueron demasiado lentos para evadir y fueron instantáneamente convertidos en una neblina de sangre, sin dejar ni rastro de huesos.
—¿Qué clase de monstruo es este?
—¡Qué poder tan increíble, mató a una Potencia Venerable Santa de un solo golpe!
La multitud estaba conmocionada, ya que entre los que no habían logrado evadir, había una potencia que había alcanzado el Reino Santo Venerable, reducida a una neblina de sangre.
—¡Corran!
Cuando todos volvieron en sí, huyeron hacia el cielo en todas direcciones, sin intención alguna de resistir.
¡Boom!