—¡Ajá, Hierba de Escarcha Fría!
En lo profundo de los densos bosques de la Cordillera Yulin, una voz llena de alegría resonó en la lejanía, seguida rápidamente por una silueta rechoncha que destellaba entre los árboles, recogiendo una pequeña hierba blanca que parecía emanar aún un toque de frialdad.
—Tan Yun, mira, es realmente Hierba de Escarcha Fría, esta debe ser uno de los ingredientes listados en la Receta de Píldora, ¿verdad? —el Discípulo regordete sintió el frío de la pequeña hierba blanca en su mano, pareciendo algo inseguro.
Resultó que este alegre muchacho rechoncho no era otro que Ling Wan, quien había sido herido por un golpe de palma de Cao Jun aquel día. Después de varios días de viaje apresurado y recuperación, sus heridas parecían haber sanado bastante bien, y su personalidad vivaz no le permitía quedarse quieto ni un momento.