El largo cabello de Nangong Xingyu caía sobre sus patillas, su túnica ondeaba con el viento, adornada con destellos de luz estelar como si pudiera enfrentar a legiones con ecuanimidad, encarnando un aire indescriptible de confianza despreocupada.
—He ascendido al Reino Marcial del Vacío y he comprendido los Misterios Profundos de la Ley, así que usaré solo el poder de mi físico único, y solo un movimiento. Si puedes resistirlo, entonces continuaré atacando —pronunció Nangong Xingyu con calma.
—¡Solo un movimiento!
Xiao Ye se estremeció al escuchar esto, consciente de que la declaración de Nangong Xingyu se basaba en una fuerza invencible, no en arrogancia ciega.
¿Seguía siendo considerado insignificante a los ojos de su oponente, incluso después de que su poder había crecido enormemente?