Lin Xifeng asintió con la cabeza, curioso por saber qué hacía especial a Xu Nian.
Pero Yuu Fei a su lado lo desestimó, con una mirada que decía «prepárate para decepcionarte».
—¡Rápido, miren, Chengfeng está aquí!
En ese momento, surgió una exclamación de la multitud, y de repente las gradas se llenaron de murmullos.
Especialmente las estudiantes, cuyos rostros se iluminaron de emoción, mirando a Chengfeng como fans enamoradas.
Dentro de la Academia Qinglin, Chengfeng era una figura que causaba bastante revuelo, no solo porque era el décimo en la Lista del Dragón Azul, sino también porque era el primero en la Lista del Dragón Oculto.
Con solo veinte años, ya había alcanzado la cima del Reino de Estrella, un verdadero genio.
Con tal talento, no era de extrañar que las estudiantes lo idolatraran, sin mencionar que Chengfeng tenía una apariencia decente, lo que naturalmente causaba sensación tan pronto aparecía.