—¿Xu Nian de la Mansión de Batalla? ¿Realmente es de la Mansión de Batalla?
La multitud a su alrededor exclamó sorprendida, sin haber esperado que el joven frente a ellos fuera un miembro de la Mansión de Batalla.
Era la primera vez que veían a un miembro tan joven de la Mansión de Batalla.
Chu Lin y la mujer de blanco también estaban llenos de sorpresa; habían especulado sobre la identidad de Xu Nian, pensando que venía de varias fuerzas misteriosas poderosas, sin imaginar nunca que era de la Mansión de Batalla.
Para ellos, la Mansión de Batalla no era nada comparada con su Secta Wuji.
Sin embargo, un joven que había salido de la Mansión de Batalla poseía tal fuerza que desafiaba los cielos, impactando profundamente sus corazones.
Temían que nunca más se atreverían a llamarse genios a partir de entonces.