Ataque de Pánico

Como mujer, Ruby no podía imaginar el puro terror que Marlene tenía que soportar a diario. Docenas de hombres tocarían cada centímetro de su cuerpo, y ella se veía obligada a entregar su cuerpo a esos humanos codiciosos y no podía hacer nada para resistirse.

Si Maulvi no rescataba a Marlene pronto, probablemente ya no podría vivir una vida normal, y Maulvi cargaría con la culpa por el resto de su vida.

—Además, ella también es la clave para la victoria de mi corte. Estoy segura de que Su Majestad tiene una manera de ganar, pero sería mejor estar en guardia —Ruby quitó la mano de Basen de su brazo cuando recuperó sus fuerzas—. Si puede serme útil o no, lo veremos más tarde.

Basen suspiró cansado.

—Señora, su corazón es demasiado bondadoso para este mundo.

Basen a veces ni siquiera entendía cómo alguien con una buena actitud y pensamientos amables como Ruby podía tener un pasado tan malo.