La ceniza del Primer Caído flotaba lentamente en el aire. Cada partícula chispeaba con un débil resplandor turquesa antes de desvanecerse.
Rill permanecía de pie, jadeando. El fuego tricolor que envolvía su brazo izquierdo se había vuelto más estable, menos salvaje. Pero aún latía con vida propia.
[Nueva Función del Sistema Desbloqueada: Acceso Inicial al Núcleo de Juicio]
Un símbolo flotante apareció ante él: una balanza envuelta en llamas, vibrando como si lo reconociera.
[¿Deseas ingresar al Núcleo del Juicio?]
Advertencia: La decisión es irreversible hasta el siguiente juicio mayor.
Rill dudó solo un segundo.
—Sí.
El mundo estalló en luz blanca.
[Interfase del Núcleo de Juicio – Espacio del Juez Rechazado]
El nuevo entorno era un templo suspendido en el vacío. Columnas flotantes, fuego eterno ardiendo en urnas de piedra negra, y una gran esfera en el centro que pulsaba con energía: su sistema.
Una voz masculina y profunda resonó:
[Bienvenido, Rill Hwan. El Juicio reconoce tu derecho a existir.]
[Nuevas Funciones Activadas:]
Misiones Secundarias Personalizadas
Panel de Progresión de Karma
Tienda del Juicio (Beta)
Dominio de Habilidades Avanzadas
El HUD parpadeó.
[Misión Secundaria Obtenida: Las Llamas No Mienten]
Objetivo: Usar tu fuego para revelar la verdad oculta de tres objetos malditos.
Recompensa: +10 INT, +Nueva habilidad pasiva.
[Misión Secundaria Obtenida: El Peso del Dolor]
Objetivo: Absorber una emoción pura de una entidad viva.
Recompensa: +20 Karma, desbloqueo parcial de “Llama de Compasión”.
Rill se acercó a la esfera y tocó el icono de la tienda.
[Tienda del Juicio – Beta]
Un mercado flotante digital se desplegó, con objetos únicos e intrigantes:
Fragmento de Llama Rota – 250 Puntos de Juicio: “Un pedazo de juicio fallido. Arde con rencor.”
Capa del Silencio Ardiente – 800 Puntos: “Oculta tu presencia ante jueces corrompidos.”
Contrato de Almas (Usado) – 1000 Puntos: “Un pacto olvidado, peligroso pero útil.”
Rill tenía 400 puntos. No podía comprar nada de gran nivel aún, pero una pestaña brilló:
[Acceso Exclusivo: Recompensa del Primer Caído]
Abrió el ítem:
[Ojo del Caído] – Pasiva: “Detecta la presencia de entidades que mienten al sistema.”
Instalar ahora?
—Instalar.
Un ardor cruzó su ojo derecho. Cuando abrió los ojos otra vez, su visión había cambiado. Las cosas mentían. Y él… podía verlo.
[Mundo Exterior – Distrito Central de Gyeongjin]
—¿Sientes eso otra vez?
La joven de ojos violáceos alzó la mirada al cielo. Se llamaba Haeryeon, una investigadora del núcleo de selección.
—Este fuego no solo juzga… sana. Y condena a la vez.
Observó una proyección del sistema ilegal que había detectado.
—Rill Hwan… rechazado oficialmente, pero vinculado a un núcleo. Eso no debería ser posible.
Detuvo el video. Su imagen reflejada en la pantalla le mostraba preocupación… y algo más: interés.
—Te encontraré antes de que lo hagan ellos.
Se levantó y desapareció entre el gentío, sin que nadie notara el extraño símbolo que parpadeaba detrás de su cuello: el mismo que había visto Rill en el templo.
[Regreso al Núcleo del Juicio]
Rill avanzaba por el templo. De pronto, escuchó algo más. Una voz… familiar. Femenina. Suave.
—No debiste aceptarlo…
Se giró en seco. Nadie. Solo un eco.
Pero su HUD mostró algo nuevo:
[Conexión Espiritual Detectada – Nodo Vinculante Incompleto]
Entidad: Desconocida – Nombre codificado: “Observadora Silenciosa”
—¿Quién eres?
La llama en su brazo se alzó sola, apuntando hacia la columna más lejana.
[Nueva Misión Principal Disponible: El Vínculo que No Debería Ser]
Objetivo: Encontrar a la entidad que activó tu conexión espiritual.
Advertencia: Esta misión altera el flujo del sistema.
—¿Aún hay más… secretos?
Antes de poder dar un paso más, una grieta se abrió en el aire.
De ella emergió una figura imponente, cubierta de metal blanco y fuego carmesí, con ojos como carbones encendidos.
—Tú… no deberías estar aquí.
[¡Mini Jefe Emergente: Guardián del Balance!]
Nivel: ??? – Hostilidad: Mortal – Tiempo límite para escapar: 60 segundos
Y el templo entero tembló.
[Fin del Capítulo 4 – Próximo: “El Guardián y la Rebelión del Sistema”]