Kei ha entrenado toda su vida para enfrentarse a lo imposible, pero nada lo preparó para esto...
Un castillo olvidado por la marea.
Una princesa que no necesita ser salvada.
Un dragón que no se parece a ninguno de las leyendas.
Y un reino donde las antiguas tradiciones no perdonan la ignorancia.
Kei no vino a salvar a nadie.
Ni a enamorarse.
Ni a morir.
Solo vino a medir su fuerza.
Pero en el Reino de Seiryu, incluso una intención inocente puede desencadenar una guerra.