Yo llevo esta marca

Gabriel abrió la puerta del salón privado donde Louis y Karmen lo habían estado esperando.

Los dos se levantaron y le hicieron una reverencia.

Gabriel tomó asiento, diciéndoles que se sentaran.

—¿Por qué mentiste sobre no tener la información? —preguntó.

—¿Por qué crees que tengo la información? —Louis arqueó una ceja.

—Te elegí para cumplir esta tarea por una razón —respondió Gabriel—. No hablemos en círculos y dame la información por la que he venido aquí —afirmó.

—El pequeño boceto de un tatuaje que me diste es una marca, que aparece después de que alguien es maldecido —Louis repitió las mismas palabras que Glenice le había dicho—. La persona también mencionó que no es una maldición ordinaria. Está vinculada a la destrucción... y al dolor. La cura para invocar esta maldición se ha perdido durante siglos. Además, Príncipe Gabriel, si alguien posee esta marca, entonces debe haber hecho algo malo en su vida pasada.