Regalos

Punto de vista de Olivia

Había pasado un día desde que regresé del Shadow Pack, y no había salido de mi habitación.

No es que los trillizos me hubieran castigado, no, simplemente no quería salir. No quería ver sus caras.

Deseaba que simplemente aceptaran mi rechazo, que estuvieran con Anita y me dejaran seguir con mi vida. Pero no. Eran como depredadores, y yo era su presa. Sabía que nunca me dejarían ir.

Suspirando profundamente, aparté la manta. Últimamente, algo se sentía... extraño. Había una sensación extraña dentro de mí, algo que no podía explicar del todo, pero en el fondo, sabía que algo no estaba bien.

Arrastrándome fuera de la cama, crucé la habitación y aparté las cortinas. Abrí las ventanas e inhalé la fresca brisa matutina. Mi mirada recorrió el pack: los árboles imponentes, el bosque distante, y un profundo suspiro se escapó de mis labios.