¿No me deseas?

Audrey siguió escépticamente a Alfa Lago dentro de los bosques, con su mano envuelta firmemente alrededor de la de él mientras la guiaba más profundo en el bosque.

—Cuidado, Catherine —dijo Alfa Lago mientras levantaba una rama del camino para que Audrey pasara.

Audrey había estado perdida en profundos pensamientos y realmente no estaba prestando atención a dónde iban, no hasta ahora.

Las alarmas sonaron en su cabeza cuando vio que él la guiaba en la misma dirección que su jardín secreto.

¿La había descubierto? ¿O había descubierto el jardín secreto con su estatus y quería preguntarle al respecto?

¡No! Así no es como debería ser, ¡no se suponía que lo descubriera de esta manera!

—Eh... ¿Por qué-dónde... ¡Oh! —Audrey respiró aliviada cuando él la guió más allá de los dos enormes árboles.

—¿Qué estabas diciendo, Gatita? —Alfa Lago se detuvo y se volvió hacia ella.