Audrey estaba sumida en sus pensamientos mientras caminaba por el largo pasillo hacia la habitación de Ms. Bridet. No se dio cuenta de que la estaban siguiendo desde el momento en que bajó las escaleras del apartamento del Alfa Lago.
Llegó a la puerta de Ms. Bridge y distraídamente levantó la mano para llamar a la puerta, pero antes de que su mano pudiera alcanzarla, otra mano se le adelantó y golpeó la puerta antes que ella.
Audrey se sobresaltó y miró rápidamente detrás de ella solo para encontrar a Sandra mirándola con una sonrisa burlona.
—Supuse que estabas en tu era de pereza, así que decidí acelerar un poco las cosas por ti —Sandra le guiñó un ojo a Audrey.
Audrey resopló con una risa silenciosa, sacudiendo la cabeza ante su amiga.
—¿Estás bien? —preguntó Sandra seriamente.
Sabía que su amiga estaba preocupada, era obvio por la forma en que la miraba.
Antes de que Audrey pudiera responder, la puerta detrás de ellas se abrió.