—¿Qué? —Ren Chuqing quedó atónita, y después de un momento dijo:
— Esos derechos de patente, no tengo intención de transferirlos a ninguna empresa. Además, la nueva fórmula en la que mi departamento de investigación y desarrollo ha estado trabajando está casi terminada, y debería estar lista para entrar en la línea de producción en poco tiempo.
—¿Y si insisto en que entregues ese lote de fórmulas a GGK? —presionó Qin Jingzhi.
Ren Chuqing lo miró con sospecha. Qin Jingzhi no había mostrado el más mínimo interés en estas fórmulas copiadas antes, entonces ¿por qué insistía tanto ahora?
—¿Por qué? —preguntó ella.